Tener orgasmos sucede por un conjunto de factores que varían en cada persona. Skokka propone desarrollar el tema enseñando los componentes que afectan la intensidad de los orgasmos. ¿Es posible medirlo a partir de las características que cada persona presenta? Mucho más que una cuestión fisiológica, el psicológico influye directamente en estas “condiciones orgásmicas”.
Algunos factores pueden ser los más importantes para la intensidad del orgasmo. Hay gente que siente placer al ver. Otros sienten placer cuando la pareja está en su mejor momento. También están aquellas mujeres que necesitan mucho estímulo para tener unos segundos de orgasmo. Mientras tanto, una serie de condiciones son las que hacen posible esa placentera experiencia.
Entre la estimulación de las zonas erógenas, las hormonas y la disposición física de cada individuo, algunos aspectos se concentran a la vez. Entonces, ¿cuáles son estos aspectos?
Primeramente hay que saber que el orgasmo tiene muchas ventajas naturales para los que lo consiguen. No es por nada que se refieran de mala manera, a una persona que en general está de mala leche que ¡le falta un orgasmo! Entre los médicos y psicólogos los estudios se basan en diferentes formas.
Los profesionales de la medicina se basan en los cambios fisiológicos y sus reacciones químicas. Los psicólogos y los profesionales de la salud mental se basan en los cambios emocionales.
Lo que se sabe es que los orgasmos mejoran el humor. Relajan y permiten momentos de relajación total. Algunos de estos beneficios se deben al proceso de reacciones químicas y hormonales en el cuerpo humano. Mucho más de lo que ocurre sólo durante la estimulación sexual, los orgasmos se presentan por factores internos y externos.
Mientras tanto, se puede decir que todas las personas de todos los géneros u orientaciones sexuales pueden experimentar trastornos orgásmicos. Entre estos trastornos se encuentra la eyaculación precoz en los hombres. En todos los casos, vale la pena señalar que hay varios estudios sobre los componentes que conducen al orgasmo. Además, su intensidad y factores son temas que generan mucha curiosidad.
Factores psicológicos de los orgasmos
Se dijo antes sobre los efectos de las influencias internas y externas sobre el orgasmo. Un equipo de la Universidad de Granada centró el interés en la investigación en los aspectos psicológicos del orgasmo. El objetivo del estudio era analizar la experiencia subjetiva del orgasmo asociada a factores personales y sociales.
El estudio se llevó a cabo en una muestra de 1.300 adultos. El punto en común entre la gente era estar en una relación heterosexual durante al menos seis meses. Dentro de todos los factores presentados en las respuestas a las preguntas, los principales componentes que determinan la intensidad del orgasmo son bastante conocidos.
Se consideraron los sentimientos personales, valores y principios, intimidad, cuánto valora uno el momento de placer del otro, si genera placer… Como resultado se llegó a los principales factores. Son ellos: edad, la satisfacción sexual, la búsqueda de diferentes sensaciones en el sexo y el propio deseo sexual.
La edad como el componente más negativo
Tal vez esta sea la condición más negativa de todas. Dentro de un estudio de percepción, se observa que a medida que uno envejece, los hombres y las mujeres reportan menos intensidad en la experiencia orgásmica.
Otros factores pueden activar aún más esta característica. Entre ellas, las disfunciones sexuales que pueden hacer todo un poco más difícil y menos intenso.
Si para los hombres algunos estímulos son suficientes para lograr un buen orgasmo, para las mujeres el proceso es más complicado. No hay una fórmula real que permita a todas las personas tener el mismo nivel de placer.
La búsqueda de sensaciones sexuales a través de los orgasmos
Esto mide la actitud positiva hacia el sexo en la relación. La persona que busca el sexo con una predisposición a encontrar nuevas experiencias sexuales presenta un orgasmo más placentero e intenso.
En este caso entran las fantasías sexuales, juegos preliminares y las ganas. Una pareja con más variedad en las ideas, fantasías y novedades suelen ser más completas y tener un sentimiento más fuerte en lo que se refiere a intensidad.
Satisfacción y deseo sexual
Un poco parecido al aspecto de búsqueda de sensaciones sexuales, la satisfacción es un gran medidor de intensidad de orgasmos.
De manos dadas con el deseo sexual – que en el caso también dependerá en algunos momentos de las condiciones cotidianas que varía en cada persona, forma parte de uno de los puntos claves del placer.
El deseo sexual puede, solo con la mirada, activar el “modo cachondeo” que puede ser aprovechado por mucho tiempo.
Además de todos los aspectos que pueden influir en las condiciones de un buen sexo u orgasmo intenso, hay un contante miedo de que el otro no llegue a ese orgasmo.Se sabe que es un miedo que interfiere y puede perjudicar hasta el mejor de todos los sexos.
Se aconseja disfrutar del sexo en todas las edades, de todas las maneras deseadas. Y si se puede ayudar para que todo sea más intenso de forma positiva, ¿por qué no? El mejor sexo es el sexo sano, deseado y realmente vivido entre los practicantes.