Así se logra un orgasmo sin sexo

¿Es posible alcanzar y experimentar un orgasmo sin sexo? La respuesta es clara y contundente, sí. A pesar de que la mayoría de las personas tienen estos dos conceptos muy unidos, es posible concebirlos por separado. De la misma manera que existe y todo el mundo conoce las relaciones sexuales sin alcanzar el éxtasis del placer, se puede conseguir la inversa.

Puede parecer algo difícil de experimentar esa sensibilidad, pero hay casos. De esta manera con paciencia y ganas se puede llegar a disfrutar. Aunque sea de manera esporádica e inesperada.

¿Qué se considera sexo?

Algunas personas tan sólo entienden las relaciones sexuales cuando implican directamente la penetración. Ya sea con un pene, o cualquier objeto sexual. Pero de esta manera, quedan muchas prácticas excluidas.

Por ejemplo, la masturbación, el tantra, masajes eróticos, el BDSM, el sexo oral e infinidad de otras tantas. Todas estas diferentes formas de estimulación, más allá de la penetración, son perfectamente válidas y efectivas para intensificar el placer. Es por ello que en este sentido es posible que resulte confuso hablar del orgasmo sin sexo. 

En resumen, mediante la estimulación física o con objetos está claro que se puede llegar al éxtasis del placer. Probar con las zonas erógenas, cuello, lóbulos de las orejas, pezones, genitales, muslos… Experimentar y centrarse en cada una de las sensaciones que se van creando hasta dejarse llevar a la máxima excitación.

orgasmo sin sexo

El mejor orgasmo sin sexo

Lo primero que es necesario dejar claro, es que cada persona es única y que cada una tiene unos gustos y sensibilidades diferentes. Por no hablar de las fantasías y fetiches que existen y pueda gozar. Por lo que disfrutará unas cosas más que otras. 

Una vez conocido esto, es más sencillo estar más abierto a experimentar y sentir. Pero antes de ponerse manos a la obra es importante cumplir unas condiciones. Porque a la hora de alcanzar el orgasmo y disfrutar plenamente influye el estado físico, mental y emocional propio y de la pareja sexual ( en el caso de que la haya). Por lo que cuidando estos aspectos, será más sencillo alcanzar mejor y más rápido el objetivo.

Antes de nada

Para poder disfrutar al máximo, es necesario estar de una determinada manera. Quien algo quiere, algo le cuesta y desgraciadamente es difícil conseguir un orgasmo sin sexo y sin hacer nada tampoco.

  • Relajarse. Reducir los niveles de estrés y ansiedad es primordial para que el sistema nervioso y el resto del cuerpo pueda estar predispuesto a la posibilidad de experimentar un orgasmo.
  • Estar cómodo. Es un poco complicado llegar a los extremos del placer haciendo el pino puente por ejemplo. Mientras se está concentrado en mantener el equilibrio, no caerse o cualquier otra cosa que no sea disfrutar, es más difícil.
  • Dejarse llevar. Tener tiempo y espacio para dedicarse a uno mismo, disfrutar y estar “abierto” a cualquier posibilidad de placer que se presente, centrándose en ella olvidando el resto.
  • Autoconocimiento. Descubrir aquellas cosas que uno mismo más disfruta, hobbies, fetiches, fantasías, sueños, puntos sensibles… Para aprovecharlos y maximizarlos para alcanzar ese punto mágico máximo del placer.

Empieza el placer, en busca del orgasmo sin sexo

Una vez de esta manera, es hora de ponerse manos a la obra. Aunque es cierto que se han dado casos inesperados y esporádicos. Como es el caso de algunos sueños húmedos. Levantarse excitada o con una erección e incluso gimiendo también es posible. Por ello es muy importante la imaginación. Porque incluso algunos medicamentos han provocado un aumento de dopamina y por tanto la capacidad orgásmica.

Pero existen otras maneras para alcanzar el mismo objetivo, el orgasmo sin sexo. Por un lado está el ejercicio. Sí, hay personas que realizando alguna actividad física han sido capaces de disfrutar de este tipo de placer. Con los movimientos correctos y la estimulación adecuada así como las sustancias y hormonas segregadas por el cuerpo. La perfecta combinación para experimentar el éxtasis del placer.

Otra gran opción son los relatos eróticos. Ya sea en formato audiolibro o libro para leer. Puede que no haya estimulación física pero desde luego sí que se crean imágenes bastante visuales en la mente. Y es que la imaginación es muy poderosa y es capaz de generar un deseo muy intenso. Pero, ¿y un orgasmo? Solo hay una manera de probarlo…

Directo al grano

Por otro lado también se puede ser más directo y ver contenido erótico, fotos, vídeos porno, sexting… Y si el +18 es demasiado explícito, también se puede fantasear y dan mucho juegos algunas de las series más populares de plataformas como Netflix o Amazon Prime. Como por ejemplo Sexo/Vida, Sex Education, Spartacus, The Girlfriend experience o Vikings entre otras.

Al final, como con todo, es cuestión de prueba y error. Con paciencia e interés se puede lograr. Probar con ejercicios de abdominales y suelo pélvico, montar a caballo, salir a correr o pasear con las bolas chinas, leer o ver escenas eróticas o sexuales… O incluso tan solo cerrar los ojos e imaginar todas las fantasías hechas realidad. Tan solo es necesario encontrar lo que funcione para cada uno ya que no tiene por qué ser lo mismo. Experimentar, ver cómo se siente cada cosa y disfrutar.