Porno anal: consejos, mitos y fantasías para ser el protagonista

El sexo es una fuente de placer muy poderosa para las personas. Aprovechada y disfrutada, gracias, mayormente a las nuevas tecnologías debido a su fácil acceso. Hoy en día cualquiera puede ver sobretodo a vídeos e imágenes xxx online. Por ello se han creado y existen muchas y muy diversas categorías, cada vez más, debido al aumento de su popularidad. Porno anal, lebianas, morenas, latinas, gays, maduras, tríos, etcétera.

Consumido y visualizado por millones de personas todos los días en el mundo. Ya sólo Pornhub recibió en 2017, 81 millones de visitas diarias. Aumentando así también, notablemente el público femenino el último año. En un comienzo por superar barreras y cambiar la mentalidad de la sociedad. Es un reto, la creación de material erótico, complicado debido a que debe abarcar multitud de gustos muy diferentes.

Sin embargo una de las más conocidas y populares es el anal. Aunque también es una práctica que ha sido causa de vergüenzas y tabús durante mucho tiempo. A pesar de que el agujero con más bacterias concentradas del cuerpo humano no es el ano. Contrariamente a lo que se puede llegar a pensar se trata de la boca. Y suelen ser pocos los que se resisten a besar a su pareja sexual.

Asociado erróneamente únicamente a los hombres gays u homosexuales hay muchas más personas que pueden disfrutarlo enormemente si saben cómo.

Porno anal vs sexo real

También conocido como griego, el anal se trata de un tipo muy específico de porno con el que muchos fantasean con protagonizar algún día. Esto es debido a que escenifican un tipo de sexo salvaje, duro, limpio y muy placentero. Pero ¿se parece a la realidad?

Si es cierto que lo primero que viene a la mente es que en la anatomía sexual, no está hecho para ser penetrado. Pero si es cierto que es una zona con múltiples terminaciones nerviosas (más que la vagina), además de ser un lugar mucho más apretado y que ofrece más roce y fricción y la oportunidad perfecta para estimular la próstata.

Pero esto no significa que vaya a ser disfrutado por todos siempre. No todos los actos sexuales son cómo se muestran en las pantallas. Ni tan bonito, ni tan duro, ni tiene por qué ser tan placentero. Sería todo mucho más sencillo. No todos somos como las porn stars con esa capacidad para el ensanchamiento anal o ass gaping.

Curiosamente muchas parejas deciden practicar la sodomía (sexo anal) para mantener y preservar de algún modo la virginidad. Pero con el paso del tiempo la concepción cambia y la mentalidad se abre y se normaliza su práctica. Curioso, ya que se viene haciendo desde la antigüedad, con los griegos y los romanos.

En Skokka la palabra anal se ha buscado 197.575 veces. Siendo los países dónde más se busca Brasil, Perú, Chile y República Dominicana.

Hoy en día, existe muchísima más información y facilidades para llevarla a cabo. Juguetes sexuales, lubricantes y productos en los sex shops concretos con esta utilidad como el porno anal. Como por ejemplo el douche bag un aparato utilizado para realizar una limpieza vaginal o anal interna antes de tener relaciones. Incluso nuevas prácticas sexuales que lo incluyen como el pegging o el cambio de roles.

Consejos para practicarlo y convertirse en profesional

Para principiantes…

• Lo primordial es que sea totalmente voluntaria y comunicada, ver cómo se siente una persona antes, durante y después para garantizar que la experiencia no resulte dramática. Además eliminar los escrúpulos. Al fin y al cabo el ano tiene como principal función el desalojo de heces. Por lo que no es de extrañar que su estimulación y penetración pueda dar lugar a alguna sorpresa inesperada.
• En segundo lugar, si es la primera vez que se intenta, tranquilidad. Además de la higiene y tener en cuenta los consejos sobre salud y precaución sobre Enfermedades de Transmisión Sexual (ETS), la paciencia, sentirse cómodo y relajado es necesario para disfrutar del sexo anal.

• Antes de la penetración y para facilitarla, hay que estimular la zona para ayudar a dilatarla. Con ayuda de los dedos o incluso la lengua, realizando el conocido beso negro.
• Así como la vagina cuenta con glándulas que le ayudan a humedecerse con la excitación,  no pasa lo mismo con el ano. Es necesario utilizar lubricante con base de agua para la zona y evitar posibles irritaciones y malestares.
• Para comenzar se aconseja un ritmo lento, progresivo. Al fin y al cabo se trata de un músculo que hay que «entrenar» y preparar para abrirse lo necesario para la penetración.

Para experimentados del porno anal…

• Sigue siendo necesario estimular la zona para dilatarla y lubricarla adecuadamente aunque en mayor medida y durante menos tiempo.
• Cuánto más se practica, el dolor y las molestias más disminuyen y el placer más aumentará para ambas partes. En consecuencia, más beneficios de practicar el sexo podrán disfrutar.
• Además se puede ir incrementando progresivamente la potencia y el ritmo de cada penetración para potenciar la lívido y extremar la excitación. De esta manera con el tiempo se podrá ser el protagonista de un verdadero vídeo de porno anal.

Porque al final, experimentar y probar con el sexo duro no es incompatible con disfrutar y cuidar la higiene y la salud. Ya que al final es en lo que se basa los vídeos porno hoy en día.