Mientras leemos que en países como Japón los jóvenes entre los 16 y los 19 años pierden el interés por el sexo, y que la inmensa mayoría de los esposos tras tener un bebé ya no tienen deseo por el sexo, en Europa y América cobra fuerza el slow sex.
Ya estaba de moda el down-shifting y otras técnicas encaminadas a trabajar o vivir los viajes de una manera más relajante buscando la felicidad “en el camino y no en el resultado”.
Ahora esta tendencia ha llegado también al sexo.
Foto: Antonio Echevers
En ocasiones un quickie en la cocina, en el coche o en la oficina puede tener mucho morbo, pero el orgasmo deja de ser el objetivo principal, siendo considerado únicamente como la culminación de la práctica sexual.
Los preliminares cobran mucha más importancia, la felicidad se plantea en el sentido de disfrutar segundo a segundo del sexo.
¿Sabías que a través de los preliminares puedes alargar el estado de placer controlando la excitación para que sea más duradero e incluso para disfrutar más con el orgasmo final?
Los factores fundamentales para disfrutar de tu pareja a través del “slow sex” van siguiendo este orden:
1. Jugar a no usar las manos y evitar penetraciones
Es muy sensual y sexy intentar darse placer sin las manos y sin penetraciones, hay que utilizar mucho más la imaginación y te obliga a explorar más el cuerpo de tu pareja utilizando tu boca, labios, aliento… e incluso descubrir sensaciones nuevas en tu cuerpo.
2. Utiliza juguetes eróticos e intenta despertar los sentidos
Utiliza juguetes sexuales, aceites aromáticos, bebidas alcohólicas afrutadas, alimentos sensuales… con el fin de despertar todos los sentidos y preparar el cuerpo para el orgasmo final.
Para animar el encuentro sexual puedes pedirle a tu pareja que utilice lencería sexy, botas de cuero, zapatos de tacón y tú puedes elegir una ropa interior masculina sexy, hacer un striptease o dejarte vendar los ojos.
3. Haz un masaje, exprime el sexo oral y la masturbación:
Aunque parezca extraño jugar con los masajes, felaciones, el beso negro, el cunnilingus y el annilingus retrasan la eyaculación y son maneras diferentes de dar y recibir placer y convertir la práctica del sexo en algo más placentero.
Permitete vivir el acto sexual momento a momento y no centrarte en el acto final que podemos señalar categóricamente que está sobre valorado frente los preliminares.
No abuses de las penetraciones y sobre todo de las penetraciones anales y disfruta más de tu imaginación, hay miles de cosas que puedes descubrir de tu cuerpo, del cuerpo de tu pareja y del sexo en general.
Lo mejor del slow sex es que te obliga a probar nuevas cosas.
Y, ¿tú? ¿que has probado nuevo últimamente?