Cada día el sexo se trata con una mayor naturalidad despareciendo los tabúes, ello ha dado lugar, por ejemplo, al crecimiento del movimiento swinger o de las experiencias tranny.
Mientras que estás experiencias las viven sobre todo personas de mediana edad, la gente más joven están poniendo de moda prácticas como el dogging o el public flashing.
Estas tendencias son la extensión de sus hábitos de vida.
Vivimos en una sociedad más individualista donde las personas, y sobre todo la gente joven, somos más narcisistas. Nos gusta cuidar nuestro físico y dar a conocer nuestras vidas. El mayor ejemplo de nuestro individualismo esté en la práctica del selfie.
Este modo de vida se ha extendido a las prácticas sexuales
Los jóvenes están practicando cada día más el dogging o también llamado “cancaneo”. Está llegando a España y Latinoamerica con mucha fuerza. Consiste en practicar sexo con desconocidos. Aquí viene el toque narcisista y morboso: en lugares públicos ante la mirada atenta de terceras personas.
Generalmente se práctica en vehículos, en la playa o parkings. De hecho muchas escorts que se anuncian en skokka.com nos han transmitido que cada día más clientes solicitan que el servicio sexual se preste en un lugar donde sean vistos por desconocidos.
Esa necesidad de exhibicionismo, de ser conocidos ha hecho que también se extiendan prácticas similares, como el public flashing.
La red está llena de vídeos de chicas y chicos que muestran sus pechos o su culo, o incluso que se masturban en lugares públicos.
Muchos lo consideran negativo porque piensan que es una falta de respeto hacia los demás. Creen que suponen el reflejo de una sociedad individualista y narcista. Sin embargo, muchos otros consideran que es muy positivo. Uno de los motivos es que cada vez se vive el sexo y el cuerpo humano con mucha más naturalidad y sin tabúes a su alrededor.
¿Tú qué opinas?